Oficial de Policía de San Juan enfrenta acusaciones tras mortal persecución; Testimonios y versiones en audiencia
El oficial de la Policía de San Juan, Ricardo Rodríguez Garay, se encuentra en el ojo del huracán luego de protagonizar una balacera que resultó en la muerte de Gastón Orihuela durante una intensa persecución el pasado viernes en el departamento Valle Fértil. En la audiencia de formalización, Rodríguez dio su versión de los hechos, alegando que su intención nunca fue causar la muerte, sino detener la marcha del camión que, según él, ponía en riesgo vidas.
Rodríguez, quien tenía el derecho de permanecer en silencio, optó por hablar y expresó que el camión zigzagueaba peligrosamente por una ruta provincial, poniendo en riesgo la vida de terceros, incluida la suya propia, así como la de los policías que llevaban adelante la persecución. Afirmó que trató de persuadir al conductor para que detuviera el vehículo y que su acción fue en respuesta a una resistencia y atentado a la autoridad, considerándolo ya un delito.
«Lo único que yo intenté hacer en todo momento fue persuadir al conductor para que detuviera la marcha del rodado. Jamás, jamás, bajo ninguna circunstancia mi intención fue causar la muerte. Lo único que estaba tratando es que detuviera la marcha», explicó Rodríguez ante la jueza de Garantías, Flavia Allende.
Sin embargo, el testimonio de la agente de la Policía de San Juan, de apellido Aciar, quien estaba presente en el patrullero durante la persecución, arrojó detalles comprometedores sobre el comportamiento de Rodríguez. Aciar reveló que el oficial disparó al menos 16 tiros sobre el camión, varios de los cuales impactaron en Orihuela. Al finalizar la persecución, Rodríguez, frente al cuerpo de Orihuela, expresó: «Me la mandé, creo que se murió».
Estas declaraciones generaron una extraña mueca en el rostro del oficial, quien parecía desconocer que se haya pronunciado de esa manera. Este testimonio se suma a la complejidad del caso, donde Rodríguez ya enfrenta acusaciones de homicidio agravado.
La versión de la agente Aciar pone en evidencia la magnitud de la violencia desplegada durante la persecución, comprometiendo aún más la posición del oficial. Mientras el proceso legal sigue su curso, la sociedad espera respuestas claras sobre los eventos que llevaron a la trágica muerte de Gastón Orihuela y la actuación de la Policía en este caso.
Los comentarios están cerrados.