Salario y alquileres: ya se necesita más del 60% de un sueldo promedio para un departamento

Considerando la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE), que subió por debajo de la inflación en los últimos meses, los alquileres representaron entre un 45% y 100% del sueldo de acuerdo a la cantidad de ambientes.

En un contexto de alta inflación, el precio de los alquileres continúan altos en relación a los salarios. En 2023 aumentaron por encima del índice de precio al consumidor (IPC) y en lo que va de 2024, tras la derogación de la ley que regulaba los contratos de locación para viviendas, subieron por debajo de la variación de precios, pero no logran llegar a un costo razonable en relación a los haberes de los trabajadores.

Para alquilar un departamento de dos ambientes se necesitó un 64% de los ingresos de un trabajador considerando la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE). En tanto, para un monoambiente se requirió el 45% y para un tres ambientes el 100%, según la consultora PxQ que conduce Emmanuel Alvarez Agis.

El costo promedio de alquiler en pesos fue de $266.092 para un monoambiente (+7,0% vs enero del 2024), $362.727 para un dos ambientes (+2,2% vs enero del 2024) y $536.614 para un tres ambientes (+0,6% vs enero del 2024). Además, la oferta se encuentra en mayor medida en moneda local (62%), mientras que solo un 37% está en dólares y el 1% restante con la mención «a consultar».

En medio de la discusión por la validez del DNU 70/2023 en el Congreso de la Nación, el informe de PxQ resalta con la ley 27.551 el mercado estaba con aumentos por encima de la inflación y una oferta casi nula. Sin embargo, tras los los cambios en la ley de alquileres el pasado octubre de 2023 -dónde la actualización era semestral (en lugar de anual), pero se obligaba a que los precios sean en pesos y los contratos por tres años-, la oferta subió.

Pero luego del triunfo de Javier Milei en el balotaje, en noviembre la oferta volvió a sufrir una fuerte caída ante la incertidumbre de qué haría el líder libertario con la norma que regulaba los contratos de viviendas, ya que en el pasado había mostrado su descontento con la legislación.

DNU y alquileres

Finalmente, el 22 de diciembre la nueva administración presentó el DNU -hoy en pugna- que entre otras modificaciones, aplicó una desregulación de los alquileres. Esto hizo que la oferta experimente un «fuerte aumento en el mes de enero tanto en pesos como en dólares» y se redujeran las publicaciones con precios “a consultar”. «Al mismo tiempo, los precios promedio de los alquileres prácticamente no variaron», resaltó el informe.

Ahora, con el revés que recibió el decreto en el Senado el mercado volvió a ponerse en alerta. Desde la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA) expresaron su preocupación «por el impacto que ello puede llegar a tener sobre el mercado locativo a lo largo de todo el país».

«El resultado de retroceder a la normativa anterior a la sanción del DNU sería una abrupta restricción de la oferta traería como consecuencia un enorme perjuicio para el conjunto de la sociedad», señalaron desde CIA, al mismo tiempo que destacaron que la oferta tras la derogación de la ley de alquileres se duplicó y los valores aumentaron por debajo de la inflación «beneficiando a los inquilinos».

En contraposición desde la Federación de Inquilinos, compuesto por 16 organizaciones, apuntaron contra las inmobiliarias, empresarios de vivienda y políticos millonarios y resaltaron: «No hay inquilino que no esté sufriendo las nefastas consecuencias de tener que firmar contratos cortos con cláusulas indexatorias salvajes (aumentos cuatrimestrales por inflación), que harán impagables los alquileres en el corto plazo«.

En ese sentido, las organizaciones inquilinas apelaron a la «conciencia y responsabilidad social» de los diputados y dispararon: «Tienen que voltear definitivamente este nefasto decreto que solo beneficia a un puñado de especuladores rentistas, empujando a muchas familias inquilinas a situaciones dramáticas como no tener donde vivir».

Fuente: ÁMBITO

Por: Graciela Herrera

Los comentarios están cerrados.