La propuesta de Javier Milei, presidente electo, sobre la privatización de la obra pública sigue suscitando críticas contundentes de los referentes del sector en San Juan. Empresarios de la construcción y líderes sindicales han rechazado firmemente la viabilidad de este enfoque para la provincia.
Eduardo Cabello, secretario general de la Uocra y referente de la CGT local, enfatizó que el sistema de participación público-privada no resulta práctico en San Juan, ya que no existen obras rentables para el sector privado. Adicionalmente, expresó su preocupación por la pérdida inminente de empleo si se recortan los fondos para la obra pública, sugiriendo que hasta 10.000 sanjuaninos podrían quedar desempleados.
Julián Rins, vicepresidente de la Cámara Argentina de la Construcción, respaldó esta postura al afirmar que el modelo propuesto por Milei, si bien funciona en otros lugares, no es aplicable en San Juan debido a la falta de obras suficientemente atractivas para el sector privado. Este análisis también fue respaldado por Miguel Gili, presidente de la Cámara Empresarial de la Construcción de San Juan, al referirse al caso específico del dique El Tambolar, indicando su importancia estratégica para la provincia pero sin incentivos para el sector privado.
Por su parte, Marcelo Orrego, gobernador electo de San Juan, enfatizó el significado humano detrás de la obra pública, destacando su papel en la conectividad de pueblos, la construcción de hospitales y escuelas, subrayando la importancia de mantener estos proyectos para la comunidad.
En conclusión, todos los sectores coinciden en que la privatización de la obra pública en San Juan sería inviable y perjudicial a corto y largo plazo, advirtiendo sobre la posibilidad de retroceso y la afectación significativa de la economía y el empleo en la provincia.
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