Acusan al verdulero de Rawson de matar a un perro: ya tenía denuncias por maltrato animal

El pasado 1 de enero, la noticia de un caso de maltrato animal en una verdulería de Rawson, San Juan, causó indignación en la comunidad. Una sanjuanina denunció a través de redes sociales que presenció cómo el propietario de un local comercial mataba a un perro de forma brutal, lo que generó rápidamente una ola de protestas frente al negocio.

 

Vecinos y activistas de organizaciones de protección animal se congregaron en la puerta del establecimiento, que permaneció cerrado, para expresar su rechazo a este acto de crueldad. Durante la manifestación, representantes de las ONG Pitbull y Sala de Emergencias, como Emilia Merino, señalaron que no es la primera vez que el dueño de la verdulería está involucrado en situaciones de maltrato hacia los animales. «Hace diez años ya le quitamos una perrita porque la había quebrado y quemado. En su momento lo denunciamos, pero la policía no le daba importancia», afirmó Merino.

Además, desde las organizaciones comentaron que se encuentran trabajando en un nuevo proyecto de ley que propone reformas a las normativas relacionadas con el maltrato animal. En este sentido, Merino lamentó la falta de actualización en las leyes y denunció la pasividad de los legisladores y autoridades del Gobierno de San Juan ante los casos de violencia animal.

La denunciante, Evelin Reinoso, quien fue testigo del maltrato, relató cómo se encontró con la escena en la que el hombre golpeaba al animal y, aunque intentó intervenir para evitar que el maltrato continuara, el propietario la echó del local y se negó a pagarle lo que le debía por su trabajo.

Tras la protesta en el negocio, el grupo de manifestantes se dirigió hacia la Municipalidad de Rawson, donde fueron recibidos por autoridades locales. En la reunión, las autoridades municipales prometieron que clausurarían la verdulería y llevarían a cabo un relevamiento para prevenir otros posibles casos de maltrato animal en la zona.

El caso ha generado un fuerte impacto en la comunidad y en las organizaciones de protección animal, que continúan luchando por mayores sanciones y un marco legal más estricto para prevenir el maltrato de animales en la provincia.

 

 

POR LIC. EUGENIA VILA

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