Crece la Generación Distribuida en San Juan, pero el Debate por el VAD Sigue Abierto
Durante 2024, la generación distribuida, el sistema que permite a los usuarios inyectar energía solar a la red y descontarla de su consumo, registró un crecimiento del 54,5% en San Juan.
Según datos del EPRE, el número de usuarios oficiales pasó de 66 en 2023 a 102 al cierre de 2024, mientras que la potencia instalada se incrementó en un notable 129,5%, impulsada principalmente por pymes y comercios que apuestan por sistemas de mayor capacidad.
Sin embargo, el sector enfrenta un debate clave: la continuidad del Valor Agregado de Distribución (VAD), un costo que los generadores domiciliarios deben abonar por el uso de la red. Según empresarios del rubro, este cargo desincentiva la adopción de paneles solares entre usuarios residenciales, ya que el costo final termina equiparándose al de quienes no generan su propia energía.
El VAD y su impacto en el sector
El vicepresidente del EPRE, Roberto Ferrero, defendió la decisión de mantener el cobro del VAD mediante una resolución emitida el 24 de mayo de 2024. Según el organismo, eliminar este cargo implicaría aumentar las tarifas para el resto de los usuarios no generadores, ya que los costos de distribución se dividen entre todos los suministros domiciliarios.
Por su parte, José María Ginestar, director de Recursos Energéticos, explicó que las audiencias quinquenales del EPRE en 2025 podrían abrir la puerta a modificaciones en la normativa. Entre las opciones está ajustar el VAD según la ubicación geográfica: en zonas rurales podría reducirse por mejorar la estabilidad de la red, mientras que en áreas urbanas podría mantenerse o incluso incrementarse debido a los desafíos técnicos que presenta la energía fotovoltaica en estas regiones.
Energía solar y oportunidades de crecimiento
El crecimiento de la generación distribuida en San Juan ha beneficiado principalmente a sectores comerciales e industriales, mientras que los usuarios domiciliarios avanzan más lentamente. Además de este sistema, existen alternativas como los sistemas «off grid», que almacenan energía en baterías y no requieren conexión a la red, y los grandes parques solares, destinados a la venta de energía al sistema mayorista.
Con 2025 como un año clave para definir el futuro de esta tecnología en la provincia, el desafío radica en equilibrar la promoción de la energía solar con la sostenibilidad económica del sistema eléctrico. Las próximas audiencias del EPRE serán decisivas para definir cómo se regula y fomenta la generación distribuida en San Juan.
Op: Juan Llarena
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