El boom del cobre revaloriza a San Juan como eje estratégico de la minería argentina
El metal rojo alcanzó valores históricos cercanos a los 12.000 dólares por tonelada, impulsado por la escasez global y la expansión tecnológica. En este contexto, la provincia se posiciona como clave al concentrar algunos de los proyectos cupríferos más importantes del país.
El cierre de 2025 encuentra al cobre en el centro de la escena internacional. En la Bolsa de Metales de Londres, el precio del metal rozó un récord histórico al ubicarse en 11.923 dólares por tonelada, lo que representa un crecimiento cercano al 40% anual. Este fuerte repunte responde a una combinación de factores: interrupciones en la producción minera a nivel global y una demanda en constante expansión, traccionada por el desarrollo de la Inteligencia Artificial, las energías limpias y la electrificación.
Con proyecciones de bancos internacionales como Citigroup, que estiman valores cercanos a los 13.000 dólares por tonelada para 2026, el escenario mundial anticipa un déficit estructural de oferta. En ese marco, San Juan emerge como un actor estratégico, no solo por su potencial geológico sino también por el grado de avance de sus proyectos.
La provincia, que preside la Mesa del Cobre bajo la conducción del gobernador Marcelo Orrego, concentra cuatro de los emprendimientos cupríferos más relevantes de la Argentina, con impacto regional y proyección internacional.
En el departamento Iglesia, a más de 4.200 metros sobre el nivel del mar, se ubica Josemaría, un proyecto porfídico de gran escala considerado uno de los más avanzados del país. Cuenta con recursos estimados en millones de toneladas de cobre, acompañados por importantes volúmenes de oro y plata, y una vida útil proyectada de al menos 20 años, lo que lo convierte en un polo minero y logístico clave para la cordillera.
Muy cerca de allí se desarrolla Filo del Sol, un yacimiento de alta sulfuración que atraviesa una etapa de exploración avanzada. Sus últimas evaluaciones técnicas refuerzan la idea de un distrito minero binacional, con un volumen de reservas que lo posiciona entre los más prometedores de Sudamérica.
En el departamento Calingasta se localizan los otros dos grandes proyectos: Los Azules y Altar. El primero es reconocido a nivel mundial por su enorme potencial en cobre, oro y plata, mientras que Altar se destaca por su extensa zona mineralizada y la presencia de cobre y molibdeno en complejas estructuras geológicas que demandan tecnología de alta precisión.
Con un mercado internacional tensionado y fundiciones que buscan asegurar suministro a cualquier costo, San Juan aparece como un reservorio clave para abastecer la demanda futura de conductores, baterías y componentes electrónicos, insumos esenciales para el desarrollo tecnológico global. El récord del cobre no solo refleja una coyuntura favorable, sino que consolida a la provincia como uno de los pilares de la minería del futuro.
Op: Juan Llarena


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