El mensaje de Ludmila antes de su trágica muerte en un boliche

La muerte de Ludmila Ayelén Ahumada, una joven de 20 años, conmocionó a San Juan tras conocerse que falleció en la puerta del boliche Ladran Sancho luego de sufrir una convulsión. En las últimas horas, un posteo en sus redes sociales llamó la atención de quienes la conocían.

En una historia de Instagram, Ludmila compartió un mensaje que ahora, tras su inesperado fallecimiento, cobra una gran carga emocional:

«No quiero demostrar a nadie que soy una buena persona, una santa, o algo parecido. Yo no pretendo demostrar nada a nadie, no me la vivo dándome golpes de pecho. Soy dura con quien lo merece, me defiendo de quien pretendía dañarme. Doy ternura a quien me la brinda y amor a quien se lo gane. No quiero que nadie opine que soy una buena persona, me basta con saber que he hecho las cosas bien, de acuerdo a mi criterio. Por lo mismo, vivo con la conciencia tranquila y con eso me basta».

Su pasión por el deporte y su círculo cercano

Ludmila compartía en sus redes su amor por el futsal y el orgullo de ser madrina de una pequeña nena. También promocionaba el boliche donde trabajaba y en el que, lamentablemente, perdió la vida.

La joven sufrió una convulsión mientras trabajaba en la barra del boliche y, aunque fue asistida de inmediato, los esfuerzos por reanimarla no dieron resultado. Su hermano reveló que padecía una condición médica que le causaba episodios convulsivos, pero que había dejado de tomar su medicación meses atrás.

Su último mensaje en redes quedó como una despedida inesperada, que hoy resuena con fuerza entre sus seres queridos.

 

 

Op: Juan Llarena