En un giro inesperado, el senador Bruno Olivera de San Juan, miembro de ADN y vicepresidente del bloque libertario en la Cámara Alta, está considerando seriamente la opción de dimitir a su cargo. Este movimiento surge luego de una reunión de alto nivel con dirigentes de su partido, quienes expresaron su profundo malestar por la controversia desencadenada tras la firma de Olivera en el polémico aumento de sueldos de los senadores.
El encuentro, que tuvo lugar en la sede partidaria de Avenida Libertador, congregó a destacados líderes de ADN, incluyendo al presidente Javier Pelletier, al diputado nacional José Peluc, y al ex candidato a gobernador Martín Turcumán, entre otros. Durante casi cuatro horas, Olivera fue confrontado directamente con el enojo y la desaprobación de sus compañeros de partido por su participación en la medida que generó un amplio rechazo público.
Si bien Olivera no votó a favor del incremento salarial de los senadores, su firma fue crucial para que el proyecto avanzara, lo que provocó una intensa crítica hacia él como el único representante del presidente Milei que respaldó la controvertida propuesta. Además, surgieron sospechas sobre un posible acuerdo entre los distintos bloques para aprobar el aumento sin debate previo, lo que aumentó la presión sobre Olivera.
Durante la reunión, Olivera admitió su error y explicó que firmó el proyecto por razones puramente formales, sin intenciones ocultas. Sin embargo, la tensión alcanzó su punto máximo cuando se sugirió que el senador debería renunciar a su cargo. Aunque esta decisión depende exclusivamente de él, Olivera dejó entrever la posibilidad de abandonar su banca, lo que desencadenó un clima de incertidumbre sobre su futuro político.
En caso de que Olivera renuncie, se abrirá un interrogante sobre el rumbo de su carrera política, dado su origen en el sector privado como empresario de gimnasios en la provincia. Además, la sucesión en su cargo recaería en Enrique Montaño, ex diputado por Iglesia.
La semana próxima se espera una nueva reunión entre Olivera y la dirigencia de ADN, donde se anticipa que se tomará una decisión definitiva respecto al futuro del senador y su posición en el Senado Nacional.
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