Francisco calificó como «hipocresía» las críticas al documento Fiducia Supplicans
«Nadie se escandaliza si doy la bendición a un empresario que quizás explota la gente, y esto es un pecado gravísimo, mientras, se escandalizan si se la doy a un homosexual..», remarcó el el Papa en una entrevista con la revista católica Credere.
El papa Francisco calificó como una «hipocresía» las críticas al documento vaticano que avala bendecir a personas homosexuales, ya que, ejemplificó, «nadie se escandaliza» si quien recibe la bendición es «un empresario que quizás explota a la gente».
«Nadie se escandaliza si doy la bendición a un empresario que quizás explota la gente, y esto es un pecado gravísimo», remarcó el pontífice en una entrevista con la revista católica Credere.
«Mientras, se escandalizan si se la doy a un homosexual… esto es hipocresía», criticó el Papa.
La declaración de Francisco se da en referencia al documento Fiducia Supplicans, publicado por el Vaticano en diciembre, en el que se avala la bendición a personas denominadas «irregulares» desde el punto de vista canónico, como homosexuales o divorciadas.
Desde su publicación, el texto tuvo muchas críticas de parte de sectores conservadores, aunque el Papa ya explicitó que se trata de «bendecir a las personas y no a las uniones».
«El corazón del documento es la acogida de esas personas en la Iglesia», agregó Jorge Bergoglio en diálogo con Credere.
A fines de enero, Francisco aseguró que «las bendiciones pastorales y espontáneas buscan mostrar concretamente la cercanía del Señor y de la Iglesia a todos aquellos que, encontrándose en situaciones diferentes, piden ayuda para continuar, a veces para iniciar, un camino de fe», al recibir a los miembros del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, el ente que publicó la declaración «Fiducia Supplicans».
«Me gustaría subrayar brevemente dos cosas: la primera es que estas bendiciones, fuera de cualquier contexto y forma litúrgica, no requieren perfección moral para ser recibidas», añadió luego el Papa ante el ente que dirige el cardenal argentino Víctor Manuel «Tucho» Fernández.
Los comentarios están cerrados.