Según el último trabajo del organismo Perspectivas Económicas, el año entrante estará caracterizado “por alta inflación, consolidación fiscal y un ajuste en las condiciones financieras” que pesarán sobre el consumo junto con la “incertidumbre política que afectará la inversión”.
El pronóstico representa una ligera mejoría respecto del último informe, donde se estimaba un descenso del 2% para este año, aunque incrementó en una décima el descenso de 1,2% para 2024 que estimaba en septiembre último.
“Los fuertes controles a los capitales, el alza de la inflación y la alta incertidumbre de políticas restringirá aún más el consumo y la inversión en el corto plazo”, advirtió el organismo.
No obstante, destacó que las exportaciones volverán en terreno positivo para el año entrante tras una “devastante sequía”.
En ese sentido, también indicó que “la reciente suba en la producción de petróleo y gas en Vaca Muerta podrían convertir a la Argentina en un exportador neto de energía en el corto plazo”.
Otro punto valorado por el reporte es la “resiliencia” del mercado laboral con un desempleo que se situó en un 6,2% en el segundo trimestre, y que permitió servir de soporte “en la confianza de los consumidores”
“Una sustancial consolidación fiscal será necesaria para resolver los severos desbalances macroeconómicos”, indicó el informe en su capítulo dedicado al país.
“Por el momento, el financiamiento provisto por el Fondo Monetario Internacional (FMI) será la principal fuente de crédito externo. La falta de reservas está causando presión en las finanzas públicas, las cuentas externas y toda la economía en general”, agregaron.
En ese marco, la OCDE le pidió a la nueva administración del presidente electo Javier Milei que “consolide las finanzas públicas para rebalancear la economía”.
“Continuas y decisivas reducciones en el financiamiento monetario serán claves para estabilizar la economía, lo cual requerirá más ajuste fiscal”, agregaron.
El 2024 será un año caracterizado “por alta inflación, consolidación fiscal y un ajuste en las condiciones financieras” que pesarán sobre el consumo junto con la “incertidumbre política que afectará la inversión”, mientras que, para 2025, se estima “una recuperación gradual en la medida que la situación macroeconómica y las exportaciones mejoren”.
Del mismo modo, “las expectativas de devaluación” y la “remoción gradual de los controles cambiarios” mantendrán alta a la inflación para recién bajar en 2025.
«La economía argentina se enfrenta a desafíos extremos en este momento», aseguró en conferencia de prensa la economista jefe de la OCDE, Clare Lombardelli.
Consultada sobre los planes de Milei para la economía, entre ellos la dolarización, Lombardelli, en declaraciones citadas por la agencia de noticias AFP, aseguró que la «prioridad» del nuevo gobierno debe ser «reducir la inflación y aumentar la estabilidad macroeconómica».
El informe también alerta por el “envejecimiento poblacional”, señalando que el crecimiento a largo plazo dependerá de “una mayor productividad” y, en ese sentido, considera clave aumentar la participación laboral femenina “que se sitúa por debajo de países desarrollados».
Asimismo, recomienda mejorar la “eficiencia” del gasto social y “mejorar los incentivos” para reducir la informalidad laboral.
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