Nuevas bodegas mendocinas se suman a la importación de vinos chilenos

 

La controversia en torno a la importación de vinos chilenos continúa creciendo con la participación de más bodegas de Mendoza en esta tendencia. Mientras tanto, desde la Cámara de Bodegueros de San Juan afirman no tener conocimiento de empresas provinciales que estén interesadas en unirse a esta práctica.

 

El Grupo Peñaflor generó revuelo al importar cuatro millones de litros de vino genérico desde Chile. Ahora, la bodega Carricondo de Junín se suma a la lista al importar 100.000 litros de vino chileno. Además, según confirmó el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), otra bodega ha iniciado el proceso para importar vino chileno, aunque aún no se ha especificado el volumen que planea introducir al país.

 

Mauricio Colomé, de la Cámara de Bodegueros de San Juan, explicó que la motivación detrás de estas importaciones radica en una relación entre precio y calidad, y que no es una práctica nueva en la industria vitivinícola.

 

Sin embargo, estas importaciones han generado controversia debido a su posible impacto en la formación de precios de la uva, especialmente en un año en el que la región enfrenta un excedente de la cosecha anterior.

 

Por otro lado, el presidente de la Cámara Vitivinícola, Gustavo Samper, señaló que estas nuevas importaciones, aunque más pequeñas, son parte de una práctica habitual que se realiza año tras año. Explicó que se trata de importaciones de vinos especiales, principalmente blancos, destinados a mercados específicos, a diferencia de la importación de vinos genéricos como en el caso de Peñaflor.

 

Samper destacó la competencia desleal que supone la importación de vinos chilenos, dado el diferente sistema impositivo entre ambos países. Mientras que en Argentina se pagan impuestos significativos, en Chile son considerablemente menores, lo que afecta la capacidad de competencia de los productos locales.

 

En conclusión, aunque la apertura al mercado internacional es vista como positiva, muchos en la industria vitivinícola argentina exigen igualdad de condiciones para poder competir de manera justa en el mercado global.

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