El proceso judicial contra el cura Walter Bustos, acusado de abuso sexual, enfrenta un retraso tras una evaluación de la junta médica que determinó su actual incapacidad mental para encarar el juicio.
La audiencia, prevista para este martes, se pospuso debido a la situación delicada de salud mental que atraviesa el acusado, quien no estuvo presente. La junta médica recomendó esperar 30 días para una reevaluación de su estado psicopersonal antes de proceder con el proceso judicial. El tribunal de la Justicia de San Juan estableció que el sacerdote sea nuevamente evaluado el 6 de febrero de 2024, luego de recibir tratamiento psiquiátrico indicado por profesionales médicos.
Durante el lunes previo al juicio, Bustos sufrió episodios de ataques de pánico e ideas suicidas, lo que lo dejó en un estado vulnerable para enfrentar el juicio, sumado a descompensaciones anteriores durante el primer veredicto.
El sacerdote fue sometido a una junta médica con psicólogos y psiquiatras, evidenciando un «intenso temor ante la situación de juicio y la exposición pública». Tras presentar conductas suicidas, recibió tratamiento psiquiátrico en el Hospital Marcial Quiroga. La junta médica determinó que, debido a su estado emocional, no era aconsejable su comparecencia en la audiencia, solicitando una nueva evaluación en 30 días, con la posibilidad de extenderla a 45 días según el perito de parte.
El informe señala que Bustos debe ser reevaluado tras un periodo para que la medicación haga efecto, con un lapso estimado de 30 a 45 días, dependiendo de su evolución.
Cabe mencionar que Bustos enfrentaba una condena previa de un año y ocho meses de prisión condicional por abuso sexual a un menor de edad y familiar. Una segunda denuncia recibida en Anivi podría implicar una condena más severa que podría llevarlo a prisión.
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