San Juan cerró 2024 con una recaudación récord: creció un 173% y superó en un 56% la inflación

Esta cifra superó en un 56% la inflación anual del 117%, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), un resultado impulsado por la moratoria impositiva implementada por la gestión orreguista.

Un crecimiento sostenido por la moratoria fiscal

Los registros oficiales del Ministerio de Economía, Finanzas y Hacienda indican que la moratoria lanzada en mayo de 2024 fue un factor clave para este salto en la recaudación. La medida incentivó principalmente el pago del impuesto automotor, cuya recaudación experimentó un notable crecimiento a partir de su implementación, estableciendo un nuevo piso de ingresos en los meses siguientes.

Mientras que otros tributos como Inmobiliario e Ingresos Brutos mantuvieron una recaudación estable, el impuesto automotor se convirtió en la segunda fuente de ingresos provinciales, solo detrás de Ingresos Brutos. En total, el pago de patentes aportó $18.013.821.362, desplazando al ítem de sellos y valores fiscales que históricamente ocupaba ese lugar. En tanto, por Ingresos Brutos se recaudaron $158.437.612.769.

Impacto en las finanzas provinciales

Si bien el incremento de la recaudación por encima de la inflación es un indicador positivo, su impacto real en las cuentas públicas aún no está completamente reflejado en los datos disponibles en la web de Hacienda. Durante la primera mitad del año, se esperaba que la brecha entre inflación y recaudación fuera menor, incluso negativa. Sin embargo, la estabilización de los precios y la regularización de deudas permitieron un cierre con balance favorable para la provincia.

El desafío ahora es sostener este crecimiento sin depender exclusivamente de medidas excepcionales como la moratoria. En el segundo año de la gestión del gobernador Orrego, la estrategia económica será clave para mantener el equilibrio fiscal en un contexto de recorte de fondos nacionales.

Austeridad ante la falta de recursos nacionales

Desde el inicio de la gestión, el Gobierno de San Juan adoptó un plan de austeridad para hacer frente a la crisis económica y a la reducción de transferencias de Nación. Entre los desafíos más significativos estuvo la eliminación de subsidios al transporte público, lo que obligó a la Provincia a implementar medidas para mantener un boleto accesible. Además, debió asumir el financiamiento de los ítems de Conectividad y Fonid, que anteriormente eran cubiertos con recursos nacionales.

En este escenario, la capacidad de recaudación propia fue fundamental para sostener la actividad económica y garantizar la prestación de servicios esenciales. La continuidad de esta política será determinante en los próximos meses para mantener la estabilidad financiera en la provincia.

Op: Juan Llarena