Se trata del camino de acceso a Casas Viejas, una conexión crucial entre Bermejo y la escuela albergue de Casas Viejas, a unos 32 km de distancia, que atiende a aproximadamente 20 estudiantes.
La región presentaba desafíos significativos debido a suelos arenosos que dificultaban la circulación vehicular. Para abordar este problema, se llevó a cabo la construcción de una traza de unos 5 metros de ancho en promedio, utilizando aproximadamente 15,000 m3 de material granular para mejorar la capacidad estructural de la misma.
Esta tarea, aunque fundamental, no estuvo exenta de desafíos logísticos y condiciones difíciles. La distancia, la escasez de agua y las condiciones del suelo hicieron que la obra fuera compleja. Para llevar a cabo esta labor, se emplearon una motoniveladora, un rodillo compactador, un camión regador, una cargadora frontal y dos camiones volcadores.
Las actividades realizadas incluyeron la clasificación de suelos, transporte, nivelación, humectación y compactación de suelos, así como la limpieza integral del lugar y la conservación en las zonas donde no se realizó aporte.
Esta obra no solo mejora la conectividad sino que también ha reactivado las actividades escolares al garantizar un acceso seguro y condiciones óptimas de transitabilidad.
Op: Juan Llarena
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