Viñateros Sanjuaninos discrepan con el pronóstico del INV y prevén una cosecha similar a la del año pasado

 

A pesar del pronóstico optimista del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), que anticipaba un aumento del 16% en la cosecha de uva para este año en San Juan, los productores del sector viñatero discrepan y advierten que la realidad será diferente. Factores naturales, especialmente las altas temperaturas y la sequía, han impactado negativamente en la vid, lo que sugiere que la cosecha podría ser tan mala como la del año pasado.

 

Según el informe del INV, se esperaba un levantamiento de uva de poco más de 600 mil quintales, un incremento significativo con respecto a los 4.126.410 quintales cosechados en 2023.

 

Sin embargo, los productores desestiman este pronóstico, argumentando que la ola de calor registrada durante enero y principios de febrero aceleró la maduración de las uvas, afectando su calidad y peso. Aunque algunos viñedos cuentan con tecnologías de riego avanzadas, la sequía también ha contribuido al deterioro de los cultivos.

 

Juan José Ramos, un experimentado productor de San Juan, señala que la ola de calor alteró los ciclos naturales de las uvas y que la falta de agua ha sido un factor determinante en la reducción del tamaño y peso de las mismas.

 

Ante este panorama desalentador y las constantes disputas entre productores y bodegas sobre los precios, se prevé una protesta en Mendoza, a la cual se sumarán los productores sanjuaninos en solidaridad con la causa. Esta situación refleja las dificultades persistentes que enfrenta el sector viñatero en su lucha por condiciones más favorables para su actividad.